La playa de Son Saura, sobre la costa meridional de la isla de Menorca extiende su fina arena sobre varias centenas de metros antes de ceder paso a los rocosos peñascos que conforman el hueco donde el mar depositó sus rastros de sal. Las luces en esta playa a la puesta del sol y al amanecer son muy contrastadas y coloridas. La fotografía HDR (High Dynamic Range) y la alta resolución de la imagen (115 millones de píxeles) permiten recrear fielmente el paisaje. Se ha utilizado un mástil de siete metros, colocado en el mar, para conseguir el efecto de fotografía aérea que se obtendría con un dron.